(ITNOW)-. Una caída Luna y UST del 70% u 85% en un activo, en 24 horas, es algo que es impensable para los veteranos y especialistas del mercado de las criptomonedas que se ha presenciado en diversas oportunidades, pese a que se sabe de la volatilidad de la moneda digital.
En este ámbito es recurrente las caídas de tokens que sucumben de un día para otro, sin embargo, cuando esto sucede en una crypto solvente o popular, es aquí donde se encienden las alertas y pone a todo el mundo que se dedica a esto en guardia por lo que está sucediendo, principalmente inversores.
Es el caso de LUNA, la ‘cripto’ de la cadena de bloques Terra, que ha visto despegar un 97% en la última semana y que está desencendiendo en picada, cotizando hasta precios de menos de 1 dólar, aunque ahora se ha levantado por encima de los 2 dólares.
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Asimismo, ha llegado a perder posiciones en el ránking de ‘criptos’, por lo que no se posiciona, en instantes, en los primeros 50 puestos en ‘CoinMarketCap’ o ‘CoinGecko’. Para el pasado 28 de abril, alrededor de 2 semanas atrás, se cotizaba por encima de 90 dólares y su máximo histórico, alcanzado el 5 de abril, hace poco más de un mes (!!) fue de casi 120 dólares.
Aunado a esto, se le agrega que los operadores de criptomonedas están nerviosos y ansiosos por la vinculación del dólar terra (UST) -la otra ‘cripto’ asociada al proyecto- con el dólar, que cayó por debajo de los 0,70 dólares este martes y ha seguido desplomándose el miércoles hasta ver los 0,35 dólares.
Pese a los fuertes bandazos y la brutal volatilidad, busca estabilizarse alrededor de 0,5 – 0,4 dólares.
Por su parte, Terra, por medio de la Luna Foundation Guard (LFG) -que se encarga de respaldar el UST-, ha estado comprando bitcoins en los últimos meses elevando sus tenencias muy por encima de las de Tesla, ya que había llegado a acumular 3.000 millones de dólares en la ‘cripto’.
El mercado cree que podría haber vendido una gran cantidad de sus reservas para salvar la vinculación de la moneda estable con el dólar estadounidense, concretamente 1.500 millones de ellas, la mitad.
Todo esa imagen se viene en picada y por obvias razones mantienen a los inversores muy nerviosos, ya que temen que otra venta masiva de la despensa de bitcoins de la LFG aún añada más sufrimiento al bitcoin que ha puesto a prueba el nivel de 30.000 dólares este lunes y vuelve a las caídas hasta las inmediaciones de este precio.
Adicionalmente a esto, este mercado con esta realidad abre las puertas a una mayor fuga de fondos y a que la reina de las monedas digitales caiga hasta 28.000 o 25.000 dólares, de acuerdo con algunas proyecciones de los especialistas.
Inclusive en cuanto al caso del UST vuelve a poner el foco regulatorio en las monedas estables, con la Reserva Federal de EEUU (Fed) y el Tesoro de EEUU pujando por una regulación sobre estas criptos, ya que se temen sus implicaciones sobre el sistema financiero global, derivadas de su vínculo con el dólar.
En tanto la bolsa de criptomonedas global Binance comunicó que había suspendido los reintegros para LUNA de Terra y su token hermano, la UST. Binance afirmó que había interrumpido los retiros de UST y LUNA durante aproximadamente seis horas “debido a un alto volumen de transacciones de reintegro pendientes”, y añadió que “esto es causado por la lentitud y la congestión de la red”.
Producto de esta estrecha relación entre UST y LUNA con el mecanismo de acuñación y quema en la cadena,muy probablemente lo que suceda es que la ‘stablecoin’ pierda su vinculación con el dólar y haya tenido un efecto dominó.
Cada vez que el precio de UST supera su paridad en dólares, los titulares de Terra pueden quemar 1 dólar de LUNA para acuñar 1 UST.
Del mismo modo, si el precio de UST cae por debajo de 1 dólar, los usuarios pueden quemarlo para acuñar 1 dólar de LUNA. ¿Con qué propósito se realiza esta movida? Esto es con el afán garantizar que los comerciantes puedan obtener algunos beneficios del arbitraje, aunado a que destruyen UST y en la teoría crean más presión de compra para la ‘stablecoin’ descentralizada.
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