El próximo 13 de septiembre es el Día del Programador, una profesión que crece en demanda año tras año. Nearsure, proveedora de soluciones de aumento de personal IT de América latina para empresas estadounidenses y canadienses, detalló algunas claves sobre esta profesión en auge en nuestra región.
1. Nearshoring
Nearshore outsourcing es un modelo en el que las empresas se asocian con organizaciones en países cercanos para ayudarles a armar equipos para desarrollar sus proyectos tecnológicos. Para los Estados Unidos, estas compañías de subcontratación cercanas se encuentran típicamente en América Latina.
Inicialmente, estos países buscaban completar sus proyectos con países como China e India, pero en los últimos años la apuesta se volvió hacia el nearshoring, es decir, la prestación desde países cercanos al contratante. Estas contrataciones son, en general, en dólares, algo de gran interés para el mercado de talento IT latinoamericano.
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2. Talento latino
En el caso de Estados Unidos y Canadá, la subcontratación en América Latina presenta múltiples ventajas: husos horarios similares, proximidad geográfica que simplifica las ocasionales reuniones, mayor afinidad cultural y de idioma, y una región con una plataforma de servicios de tecnología de gran desarrollo, capaz de ofrecer talento IT de gran calidad.
3. Los perfiles más solicitados
De acuerdo a Nearsure, si bien depende del proyecto, hoy los perfiles más pedidos de programador son de Frontend y Fullstack (React/Angular/Node). El país de referencia no afecta en la contratación ni en la remuneración: en todos los casos, los perfiles son buscados según posición y seniority. Este punto es clave: estas empresas no buscan perfiles junior sino programadores con experiencia.
“Específicamente desde Nearsure, a la hora de buscar talento, nos centramos en la contratación de perfiles senior, con más de cinco años de experiencia laboral”, explicó Giuliana Corbo, CEO de la firma.
4. Las entrevistas de trabajo en IT: un proceso largo
Las instancias de reclutamiento para trabajo IT, en general, involucran una primera etapa de detección, en la cual el reclutador quiere conocer más sobre el talento y sus calificaciones para el puesto. Luego, una entrevista técnica en donde se evalúan sus habilidades tecnológicas y se brinda más información sobre la oferta. Es muy probable que también se le pida un ejercicio. Y una entrevista con el cliente al que se asignaría al talento.
Sin embargo, es importante entender que, aunque el proceso de evaluación incluye una gran parte técnica, no es el único foco de los reclutadores. “Buscamos que todos nuestros talentos tengan desarrollados no sólo sus habilidades técnicas o duras, si no también las habilidades blandas que son igual de importantes”, añade Corbo.