Mark Zuckerberg no para de acumular burlas y rechazos a la tecnología sobre la que depositó la multimillonaria esperanza de reconvertir Facebook.
Son varios del popes de la industria que miran con poco entusiasmo la idea de un mundo virtual y esta semana nuevos líderes se sumaron al club de los desconfiados.
Durante la conferencia Tech Live organizada por Wall Street Journal el pasado miércoles, Evan Spiegel, CEO de Snap (la empresa matriz de Snapchat) disparó: “Lo último que quiero hacer cuando llego a casa del trabajo al final de un largo día es vivir adentro de una computadora”, ante las risas de la audiencia.
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Por su parte, el director de la división Xbox de Microsoft, Phil Spencer, opinó: "Voy a meterme problemas por decir esto, pero es un videojuego mal hecho... ¿Crear un metaverso que parece una sala de reuniones? No me parece un lugar para pasar la mayor parte de mi tiempo”.
Por si fuera poco, Greg Joswiak, vicepresidente senior de marketing mundial de Apple, dijo que el metaverso es "una palabra que nunca voy a usar". Son varios en la empresa de la manzana que coinciden con su visión, empezando por su CEO, Tim Cook, que pocas semanas atrás manifestó que "no estaba seguro de que una persona promedio sepa decir qué es el metaverso". Incluso documentos internos de Meta han criticado los intentos de la empresa en la elaboración de este nuevo horizonte, y en uno califica: "un mundo vacío es un mundo triste".
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Según un reporte de Business Insider, desde comienzos del año pasado hasta hoy, Meta lleva invertidos más de US$15.000 millones en Reality Labs, su empresa brazo en el metaverso. Pero la compañía todavía no ha informado en qué ha gastando ese dinero.
Según el artículo, numerosos inversores están preocupados por la falta de información y transparencia en los números de la empresa, y decepcionados con los últimos avances y productos presentados en relación a lo que Meta considera su negocio futuro.