IA y automatización marcan el nuevo estándar en la industria de ciencias biológicas
- Malka Mekler
- 4 ago
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El 95% de los fabricantes en ciencias biológicas ya aplica o evalúa tecnologías inteligentes para enfrentar retos de calidad, ciberseguridad y escasez de talento, según un nuevo informe de Rockwell Automation.

La adopción de tecnologías inteligentes, en particular la inteligencia artificial, está redefiniendo los procesos de fabricación en el sector de ciencias biológicas. Frente a la creciente complejidad normativa, la escasez de talento y la necesidad de acelerar el tiempo de salida al mercado sin comprometer la calidad, las empresas están redoblando sus inversiones en digitalización, según el 10º informe anual sobre la situación de la fabricación inteligente publicado por Rockwell Automation.
El estudio, basado en las respuestas de 143 líderes globales del sector biofarmacéutico, revela que el 95% de estas organizaciones ya utiliza o evalúa soluciones de fabricación inteligente. Este giro no es simplemente una apuesta por la eficiencia, sino una respuesta a la exigencia de operar en entornos altamente regulados, donde la trazabilidad, la ciberseguridad y la integridad de los datos son tan cruciales como la productividad.
Entre los principales casos de uso, la IA se está aplicando para mejorar la calidad del producto (53%), agilizar operaciones (50%) y fortalecer la ciberseguridad (48%). Además, tecnologías emergentes como la IA generativa, los gemelos digitales y las herramientas de simulación están ganando terreno como mecanismos para anticipar escenarios, reducir riesgos y escalar capacidades.
La automatización también está desempeñando un papel relevante al complementar las tareas del personal calificado, una necesidad urgente si se considera que el 26% de los líderes encuestados identifica la falta de talento como la principal barrera para el crecimiento en 2025. En este contexto, el 48% de las compañías recurre a IA y el 46% a automatización para cerrar brechas operativas y de conocimiento.
Matt Weaver, vicepresidente del sector global de ciencias biológicas en Rockwell Automation, destacó que “la IA se está volviendo imprescindible para la fabricación moderna en el sector de ciencias biológicas, no simplemente para optimizar la eficiencia, sino también para mejorar la calidad del producto, proteger la infraestructura crítica y mejorar las destrezas del personal”.
Pese al aumento en la recopilación de datos, solo el 46% de los fabricantes afirma utilizarlos de forma eficaz. Esto subraya una brecha crítica en la transformación digital, la necesidad de traducir los datos en decisiones ágiles y acciones efectivas. En adelante, la capacidad de interpretar la información en tiempo real será decisiva para crear operaciones más adaptativas y resilientes.
Con un foco en el crecimiento sostenible, el 66% de los líderes prioriza inversiones que no solo incrementen la capacidad productiva (62%), sino que refuercen la protección operativa (50%) frente a disrupciones futuras. En este contexto, la IA no solo es una herramienta de eficiencia, sino un eje estratégico para garantizar la continuidad, la calidad y la competitividad en un sector donde el margen de error es mínimo.




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