El modelo más barato y eficiente de la startup china ha puesto en jaque las millonarias inversiones en inteligencia artificial de las grandes tecnológicas estadounidenses. Meta ha movilizado a sus especialistas para entender su secreto.
Meta, la compañía de Mark Zuckerberg, ha encendido todas las alarmas tras el reciente avance de DeepSeek, una startup china respaldada por el fondo de inversión High-Flyer Capital Management. Su nuevo modelo de inteligencia artificial, R1, promete igualar el rendimiento de soluciones como ChatGPT, pero a una fracción del costo, lo que podría redefinir la dinámica del sector y cuestionar las astronómicas inversiones en IA realizadas por las grandes corporaciones de Silicon Valley.
La amenaza es tal que Meta ha conformado cuatro "war rooms" de ingenieros para analizar la tecnología de DeepSeek y evaluar el impacto de su innovación. Según fuentes internas citadas por The Information, dos de estos equipos tienen la misión de identificar cómo la startup china ha conseguido reducir los costos de entrenamiento y operación de su modelo, mientras que los otros dos se enfocan en descubrir los datos utilizados para su entrenamiento y en encontrar posibles mejoras en la arquitectura de los modelos de Meta basadas en las características de DeepSeek.
El director de infraestructura de Meta AI, Mathew Oldham, ha advertido internamente que el modelo de DeepSeek podría superar incluso a la próxima versión de Llama, programada para inicios de 2025. Este panorama ha generado incertidumbre en la compañía, que recientemente anunció una inversión de hasta 65.000 millones de dólares en proyectos de IA, incluyendo la construcción de un megacentro de datos y la contratación de nuevos talentos en inteligencia artificial.
Este nuevo desafío también se produce en un contexto donde OpenAI, en colaboración con SoftBank, Oracle y otros socios, ha anunciado un ambicioso proyecto de infraestructura de IA respaldado por la Casa Blanca. Llamado Stargate, este plan contempla una inversión de 500.000 millones de dólares para la construcción de decenas de centros de datos en Estados Unidos.
Por ahora, Meta ha reiterado su compromiso con la innovación en IA y la consolidación del ecosistema de modelos de código abierto. Sin embargo, la irrupción de DeepSeek podría marcar un punto de inflexión en la carrera por la inteligencia artificial, con implicaciones que van más allá de la competencia tecnológica y que podrían redefinir el equilibrio geopolítico en el sector.
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