Un golpe sin precedentes en el ecosistema cripto pone en jaque la seguridad de los exchanges y reaviva el debate sobre la protección de los activos digitales.
El exchange de criptomonedas Bybit confirmó que fue víctima de un sofisticado ataque que resultó en el robo de aproximadamente 401.346 Ethereum (ETH), valorados en unos US$1.400 millones al momento del incidente. Este ciberataque no solo marca un hito en la historia de los robos de criptomonedas, sino que también podría representar la mayor sustracción financiera de todos los tiempos, según expertos en ciberseguridad.
El CEO y cofundador de Bybit, Ben Zhou, reveló en una transmisión en vivo que los hackers lograron comprometer una de las billeteras frías de la compañía, las cuales, en teoría, deberían estar aisladas de internet para evitar accesos no autorizados. Sin embargo, los atacantes consiguieron transferir los fondos hacia una billetera caliente conectada a la red, permitiéndoles sustraer el millonario botín.
El robo supera con creces los incidentes más notorios en la historia de las criptomonedas, incluyendo el ataque a Ronin Network en 2022 (US$624 millones) y la vulneración de Poly Network en 2021 (US$611 millones), según datos de la firma Rekt. Incluso, el cofundador de Elliptic, Tom Robinson, sugiere que esta podría ser la mayor sustracción de dinero registrada en cualquier sector, superando el retiro ilegal de US$1.000 millones del Banco Central de Irak en 2003.
A pesar del golpe financiero, Bybit aseguró que sigue siendo solvente y que tiene la capacidad de absorber las pérdidas sin comprometer los fondos de sus usuarios. "Podemos cubrir la pérdida incluso si no logramos recuperar los fondos robados", declaró Zhou en un comunicado publicado en X.
La compañía, con sede en Dubái, contaba con aproximadamente US$16.000 millones en activos antes del incidente, según CoinMarketCap. No obstante, el ataque reaviva preocupaciones sobre la seguridad de las plataformas de intercambio de criptomonedas y la vulnerabilidad de los sistemas que, en teoría, deberían proteger los fondos de los inversores.
Según la firma Chainalysis, en todo 2024 los hackers robaron un total de US$2.200 millones en criptomonedas, cifra que ya se acercaba a los US$2.000 millones sustraídos en 2023. Con este nuevo ataque, el panorama de la ciberseguridad en el sector cripto se torna aún más complejo, planteando interrogantes sobre la eficacia de las medidas actuales y la necesidad de nuevas regulaciones para fortalecer la protección de los activos digitales.
La comunidad cripto sigue a la expectativa de cómo evolucionará la investigación y si Bybit podrá recuperar parte de los fondos robados.
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