Por: Raquel Fratti
La primera edición de Salud 4.0, realizada en Costa Rica, abrió con la exposición Megatendencias en salud reinventada por parte de Angélica León, gerente de Estrategia de EY.
De acuerdo con la experta, la tecnología está llegando a las personas como nunca antes en la historia y está convirtiéndolas en superconsumidores con más control sobre su salud.
“El panorama que se avecina es el que tiene como centro al usuario. El ser humano está más consciente de lo que tiene que hacer al momento de la prevención; estamos a poco tiempo de llegar a la farmacia y que los medicamentos estén fabricados en 3D, con el historial médico de cada paciente incluido”, explicó León.
“El teléfono es el centro de nuestro universo y esto se refleja en diversas formas. Las apps integran muchos componentes del sistema de salud, no solo de ejercicio sino del ciclo de sueño y otros más”, añadió la expositora.
Tecnologías que están cambiando la industria
León destacó, por ejemplo, la app EDUS, de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
“La CCSS ha hecho un gran trabajo con el expediente digital, siendo la segunda aplicación de salud más descargada en Costa Rica”, reconoció.
Además mencionó que otras apps en el mercado preparan paquetes de salud personalizados para cada paciente; por si fuera poco, envían recordatorios al teléfono para saber cuándo tomar las pastillas.
Además, hizo referencia a Ginger, una app que funciona como un portal con videochat a diferentes expertos de salud, emite notificaciones y busca al profesional que atienda con mayor celeridad a un paciente.
Por otro lado, mencionó que los drones están siendo utilizados con más frecuencia para trasladar medicamentos a lugares de difícil acceso. Funcionan de manera segura, tanto para el paciente como para el socorrista, y además no necesitan preparación médica previa por parte del usuario final.
¿Qué viene ahora?
La speaker indicó que en poco tiempo habrá hospitales que impriman pastillas en 3D, nanotecnología que cree tejidos inteligentes para enviar datos de valores como la temperatura o las pulsaciones, entre otros.
Asimismo, dispositivos de unos pocos milímetros que adviertan sobre posibles riesgos de ataque cardiaco en cuestión de horas, dispositivos que se colocan en el ojo para enviar datos para que el paciente tome acciones, así como soluciones con forma de pastilla para reemplazar las incómodas endoscopias.
“Estamos en un momento único en la historia, donde las partes biológicas, digitales y físicas se fusionarán. Se producirán más y mejores medicamentos, los doctores estarán en mejor posición, siendo más efectivos en la detección y tratamiento de enfermedades y los pacientes estarán más empoderados con su salud”, concluyó la experta.