Sensatez y sentimientos: las IA superan a humanos en pruebas de inteligencia emocional
- Malka Mekler
- hace 1 día
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En pruebas especializadas en psicología, la inteligencia artificial obtuvo un 82% de aciertos frente al 56% humano. El hallazgo desafía premisas sobre la empatía y el manejo de las emociones.

La inteligencia artificial supera a los humanos en pruebas diseñadas para medir la inteligencia emocional, de acuerdo con un estudio reciente publicado en Communications Psycholog y reportado por el medio digital AA. Aunque durante años se ha considerado que la empatía y el manejo de emociones eran cualidades exclusivamente humanas, los hallazgos tecnológicos de este estudio desafían esa premisa.
Investigadores de las universidades de Ginebra y Berna aplicaron una batería de pruebas a seis sistemas de inteligencia artificial, utilizando herramientas originalmente desarrolladas para evaluar a personas. Los resultados fueron contundentes: los modelos de IA respondieron correctamente en un 82% de los casos, superando ampliamente el promedio humano del 56%.
Las pruebas incluían situaciones complejas de carga emocional, como responder adecuadamente cuando una idea de un empleado es robada en el entorno laboral. Más allá de identificar emociones, se trataba de demostrar comprensión contextual y regulación emocional, habilidades asociadas con un juicio sofisticado.
En una segunda fase del estudio, los investigadores solicitaron a ChatGPT que diseñara sus propias pruebas de inteligencia emocional. Más de 400 participantes evaluaron estos nuevos instrumentos, calificándolos como tan realistas como los creados por humanos, lo que indica una capacidad no solo para interpretar emociones, sino para generar marcos creíbles de evaluación emocional.
"Esto sugiere que estas IAs no solo entienden las emociones, sino que también comprenden lo que significa comportarse con inteligencia emocional", afirmó Marcello Mortillaro, uno de los investigadores principales.
Desde un enfoque tecnológico, este avance amplía el campo de acción de los sistemas de IA hacia aplicaciones en educación, mediación de conflictos y acompañamiento emocional, áreas que hasta ahora se consideraban fuera de su alcance. Aunque se enfatiza que su uso debe mantenerse bajo supervisión humana experta, el estudio abre la puerta a una nueva generación de modelos más sensibles al contexto emocional en sus interacciones.