La entidad bancaria lanzó diversas funcionalidades online para fomentar las inversiones de sus clientes.
Los cambios generados a raíz de la pandemia no son un secreto. El mundo ha presenciado una gran aceleración y transformación digital en diversos sectores y la banca no se queda atrás. En 2020 y 2021, las medidas de protección sanitaria evidenciaron la necesidad de contar con productos y servicios, especialmente bancarios, que sean digitales.
“En los últimos años, en Scotiabank nos enfocamos en ampliar nuestra oferta por medio de los canales digitales de autoservicio del banco, especialmente desde nuestro sitio web, Scotia en Línea, y la app Banca Móvil, de manera que el cliente, además de realizar las transacciones ya tradicionales en estas plataformas como las transferencias entre cuentas, pueda utilizarlas para completar procesos 100% en línea, como la solicitud y desembolso de un crédito o la apertura de cuentas de depósito, sin necesidad de realizar el trámite de forma presencial en sucursales”, explicó Andrey Guzmán, director regional de Transformación Digital de Scotiabank.
Le puede interesar: Con Win 95, sin Internet ni antivirus: La peligrosa realidad de la operación industrial en la región
Estos avances favorecieron la accesibilidad a servicios bancarios y generaron un cambio en el modo en que se realizan pagos, así como el acceso a productos de crédito y ahorro. En la actualidad, tan solo un 7% de las operaciones bancarias totales de Scotiabank se realizan de manera presencial, mientras que en 2018 el porcentaje era de 24%, aproximadamente.
En el caso de ahorro, la entidad bancaria habilitó diversas funcionalidades en sus canales digitales para fomentar este importante hábito, el cual ayuda a mantener una salud financiera adecuada.
“Un análisis oportuno de las preferencias de los clientes nos permite desarrollar productos y servicios bancarios acorde con sus requerimientos actuales. En los últimos años, observamos un creciente interés de las personas por aumentar su capacidad de ahorro, una tendencia impulsada por los efectos de la pandemia; por lo tanto, incorporamos en nuestros canales nuevas funcionalidades digitales para apoyar sus metas”, añadió Guzmán.
Vea también: Fintech y banca: ¿Cuál es el punto de encuentro?
Por su parte, el especialista destacó tres principales desarrollos que han favorecido en este aspecto. En primer lugar, resaltó la apertura de cuentas de depósito universal, la cual se puede obtener por medio de la página web.
“Una vez que se recibe la solicitud del cliente, la apertura de la cuenta se realiza en un plazo máximo de cinco días hábiles. En este período, se realiza la formalización de la cuenta y la entrega de la tarjeta de débito asociada”, indicó.
Asimismo, los certificados a plazo electrónico, donde los clientes interesados en una alternativa para aumentar su capital pueden optar por invertir en un certificado a plazo desde Scotia en Línea o la App Banca Móvil. Dichos certificados requieren de una inversión mínima de US$1.000.
Por último, resaltó la adquisición de divisas, indicando que desde mayo del presente año los clientes de la entidad cuentan con una opción específica para comprar o vender dólares desde la app del banco.